Alguna vez te has detenido una pequeña fracción de tu tiempo para contemplar lo que realmente quieres en tu vida?
Quizá para dar respuesta a esta pregunta debas pensar primero en que ya eres un ganador por el solo hecho de haber nacido, pues eres un ser totalmente apto para poder conseguir cualquier cosa que desees en la vida.
Es el sueño de muchos el de encontrar un amor verdadero y único, formar una familia, envejecer al lado del ser amado y para otros emprender un negocio o varios que le reporte alegrías y confort económico, pero para todos es mas ansiado el encontrar esa tranquilidad y paz interior que es una verdadera fuente de energía que visto desde un ángulo imparcial solo nos reportara mucha alegría en la realización de todos los deseos, sueños y objetivos que se quiera tener en la vida.
De forma equivoca, muchos en un momento de nuestras vidas depositamos nuestras esperanzas, ilusiones y felicidad en una persona de la cual nos enamoramos y esperamos que sea el o ella quien nos de muchas alegrías y felicidad pero como todos somos seres humanos la persona de quien "dependemos de manera emocional" nos decepciona y todos nuestros sueños y demás sentimientos caen en picado y nos sumimos en la depresión y hasta decidimos ignorar el amor.
Pero no nos damos cuenta de que solo nosotros debemos ser los únicos responsables de nuestros sentimientos.
Debemos pensar que si nuestra vida carece de sentimientos no podemos esperar que esos sentimientos nos lleguen desde afuera, por simple lógica y como reza en las enseñanzas de nuestros Hacedor, debemos primero ser nosotros quienes demos a los demás para que todos esos sentimientos que esperemos sean buenos retornen hacia nosotros multiplicados logrando hacer nuestras vidas mas estables y seguras.
Hoy hablemos de nuestra capacidad para lograr las cosas que anhelamos, anteriormente os había comentado de que somos nosotros fuentes de energía pura, característica propia con la que nacemos y que a lo largo de la vida no debemos olvidar, pues es así como lograremos conseguir cualquier cosa que deseemos en nuestras vidas, quizá se nos haya dicho desde niños que al crecer debemos trabajar mucho para lograr las cosas que deseamos y en partes eso tiene su razón pero esto no seria posible si no entregáramos nuestros deseos ante un Ser Superior, pues es así como se consiguen esos deseos hechos realidad.
Es poner sentimiento en un deseo, es imaginar la sensacion de que ya lo tenemos y es contemplar ante nuestra puerta de que ese deseo es ya una realidad, Todo parte de nosotros y vuelve a nosotros.
Pero esto tiene un doble fondo, pues tanto lo bueno o malo que salga de nosotros mismos va ser lo que regrese a nuestra vida, por tanto, mantengamos nuestro espíritu firme en sentimientos de los cuales nos sintamos orgullosos de tener y que serán regresados a nosotros mismos siempre multiplicados. No os olvidéis que importante es DAR PARA RECIBIR.
Sabiendo esto despierta cada mañana con la mejor de las sonrisas y piensa que cada día solo recibirás las mejores cosas de la vida. Eres un ser que vive para ser feliz y único.
CARLA